26.9.09

Cumbre de la ONU Video-Mensaje



EN MODO CONSTRUCTIVO

Y CON GENEROSA VALENTÍA


Del Video-Mensaje enviado a los participantes
de la Cumbre de la ONU
sobre los cambios climáticos,
que se realizó el 22 de setiembre en New York
(Agencia Fides)


La relación que existe entre “el Creador y nosotros, como guardianes de su creación”

“La tierra es realmente un don precioso del Creador, que al diseñar su orden intrínseco nos ha proporcionado las directrices que nos ayudan a salvaguardar la creación.

La Iglesia considera que los temas concernientes al medio ambiente y su protección están íntimamente relacionados con el desarrollo humano integral”.

“La urgente necesidad moral de una renovada solidaridad” (Caritas in veritate n. 49) en cuanto “el ambiente natural es dado por Dios a cada uno, y su uso supone una responsabilidad personal con toda la humanidad, especialmente con los pobres y con las generaciones futuras”.

“Es muy importante que la comunidad internacional y cada gobierno den las señales adecuadas a sus ciudadanos y logren contrarrestar formas peligrosas de utilización del ambiente.

Los costes económicos y sociales, que se derivan del uso de los recursos ambientales comunes, deben ser asumidos por los que hacen uso de ellos, y no por otros pueblos o por las generaciones futuras.

La protección del ambiente y la salvaguardia de los recursos y del clima obliga a todos los responsables a aunar sus esfuerzos, respetando la ley y promoviendo la solidaridad con las regiones más débiles de la tierra (cf. Caritas in veritate, 50).

Juntos podemos construir un desarrollo humano integral beneficioso para todos los pueblos, en el presente y en el futuro, un desarrollo inspirado por los valores de caridad y verdad.

Es esencial que el modelo actual de desarrollo global se transforme hacia una responsabilidad más amplia y compartida con la creación: lo exigen no sólo las emergencias ambientales, sino también el escándalo del hambre y la miseria”

Estamos todos llamados “a ejercitar una responsable gestión de la Creación, a usar los recursos de modo que cada individuo y la comunidad puedan vivir con dignidad” y puedan así desarrollar “la alianza entre el hombre y el ambiente, que debe reflejar el amor creador de Dios”.

Artículo completo en Agencia Fides


16.9.09

Tony Blair y la fe



La voz de la fe no debe estar ausente del debate público


"Personalmente, comparto totalmente lo que escribe el Papa en la encíclica, un texto brillante que debe ser leído y releído. Considero que la religión tiene un papel central, único en la sociedad y para su desarrollo".

"Pensemos, por ejemplo, en el modo en el que utilizamos la tecnología --sugiere--. Pero es también verdad que hay un conflicto, porque muchas personas quieren mantener a la religión fuera de la esfera pública".

"Sostener, como sostengo, que la religión tiene un papel importante, no significa considerar que acabarán los debates y los enfrentamientos. Éstos, al contrario, seguirán sobre muchos temas respecto a los cuales, probablemente, la Iglesia estará de una parte y los líderes políticos de otra".

"Pero no creo que éste sea el punto principal: el punto es que la fe tiene pleno derecho de entrar en este espacio y de hablar. No debe callar", insiste. "La voz de la fe no debe estar ausente del debate público (pensemos en temas como la justicia y la solidaridad entre los pueblos y las naciones)".

En su encíclica, el Papa escribe que "querer el bien común y dedicarse a él es exigencia de justicia y de caridad" (n. 7).

Sobre esto, Blair está de acuerdo: "Creo que un líder político está sujeto a algunos vínculos y debe trabajar para recoger votos. Porque esta es la democracia. Pero es precisamente aquí donde encuentro que la fe tiene un papel único".

"La Iglesia católica sigue la verdad de Dios, y creo que en lo que el Papa se empeña mucho es en tratar de hacer comprender que esta es una obligación cristiana".

"Cierto, a veces esto puede entrar en conflicto con el mundo político, y yo lo he experimentado como líder político. Y sin embargo es muy importante que esté ahí el aspecto religioso: no por casualidad el Papa escribe que un humanismo sin Dios es inhumano. Y creo que entiende con esto que las acciones humanas y la razón humana son siempre limitadas si no son imbuidas por la fe. A veces, pueden ser incluso peligrosas".

A la afirmación de que difícilmente se podrá realizar la política que el Papa traza en la encíclica, Blair responde: "La gente a menudo entiende mal la política. La política es la interacción entre idealismo y realismo: normalmente no es el triunfo de uno sobre el otro".

Artículo completo en ZENIT.org






11.9.09

El espíritu y el diálogo


EL ARTE DE VIVIR JUNTOS EN PAZ

"¡El espíritu y el diálogo darán alma a este mundo globalizado! Un mundo sin diálogo será esclavo del odio y del miedo al otro. Las religiones no quieren la guerra y no quieren ser usadas para la guerra. Hablar de guerra en nombre de Dios es una blasfemia. Ninguna guerra será nunca santa. La humanidad siempre es derrotada por la violencia y por el terror.

El espíritu y el diálogo indican el camino para vivir juntos en paz. Hemos descubierto con más claridad que el diálogo libera del miedo y de la desconfianza hacia el otro. Es la gran alternativa a la guerra. No debilita la identidad de nadie y hace descubrir lo mejor de sí y del otro. Nada se pierde nunca con el diálogo. El diálogo escribe mejor la historia, mientras el enfrentamiento abre abismos. El diálogo es el arte de vivir juntos. El diálogo es el don que queremos hacer al siglo XXI.

Llamamiento por la paz. ZENIT. org





1.9.09

REFLEXIONANDO PALABRAS VIEJAS



¿PALABRAS DE SIEMPRE PARA PROBLEMAS NUEVOS?

"Iglesia, Sociedad y Política" son viejas palabras que se refieren a formas humanas de vivir, de convivir y de obrar presentes y operantes en la actualidad de la familia humana; enraizada la una, la Iglesia, en una historia bimilenaria, y las otras dos, sociedad y política, en la naturaleza misma de "lo humano" ¡en su razón de ser! Incluso la Iglesia, como una forma histórica que vertebra y expresa una dimensión de la persona humana, inherente al mismo ser del hombre, la religiosa, se halla igualmente, en su fondo antropológico, entre los elementos constitutivos del ser y de la existencia de lo humano, que trasciende espacios y tiempos.


LA IGLESIA

La historia de la palabra es bien conocida: sus raíces vetero-testamentarias, su claro y específico perfil semántico en el Nuevo Testamento y en el lenguaje del Magisterio y de la Doctrina de la propia Iglesia. El significado ha sido vivido en el pasado con distintas resonancias históricas y lo mismo sucede en la actualidad. La Iglesia la interpretan unos con categorías simplemente sociológicas y estadísticas; otros, con categorías psicológicas y culturales y, otros, con el método comparativo de la fenomenología religiosa. Entre los cristianos de las distintas confesiones tampoco hay unanimidad en su interpretación teológica. Incluso entre los católicos se ha hecho uso teológico y pastoral de la expresión "distintos modelos de Iglesia", oponiendo a veces las teorías de los teólogos a la doctrina del Magisterio. Pero, en lo que no hay duda es en el reconocimiento de una nueva actualidad, social y cultural de la Iglesia en el siglo XX de alcance universal, más allá de las claves interpretativas de "la Modernidad" y de "la Postmodernidad".


LA SOCIEDAD

La sociedad es también palabra antigua: ¡muy antigua! Pertenece al patrimonio cultural universal de la humanidad. Designa un aspecto que le es esencial a la realidad integral de lo humano. El ser del hombre incluye constitutivamente relación al otro: corporal y espiritualmente. Su configuración, sexualmente diferenciada como varón y mujer, constituye la primera y fundamental expresión de la apertura trascendente que le es esencial y existencialmente inherente a la persona humana. El hombre sólo alcanza la realización plena de sí mismo en la inter-relación con los otros hombres.


LA POLÍTICA

La política es otra vieja palabra unida a la experiencia inmemorial del hombre que vive y necesita vivir ordenada y fructíferamente en sociedad. ¿Cómo va a ser posible la cooperación de todos los miembros de una sociedad en la consecución del bien común sin una dirección clara en sus objetivos, ordenada en su realización y firme y eficaz en la disposición de los medios? El simple realismo de la experiencia cotidiana de la vida enseña que no. Por ello, la respuesta fue siempre clara en todas las etapas y épocas de la historia social y cultural del hombre: no es posible sin autoridad. De aquí que la praxis política como la ciencia, el arte y la técnica de gobernar la sociedad humana plenamente constituida hayan orientado siempre sus esfuerzos principales a aclarar y dirimir la cuestión de la autoridad como el punto neurálgico, sociológica, jurídica y éticamente, de toda teoría social. Quién la ejerce y cómo la ejerce, cuál es su sujeto originario y en qué consiste su ejercicio, son otras tantas de las preguntas concretas que la filosofía y teología del derecho y del Estado y, actualmente, el estudio empírico de las llamadas ciencias humanas, se plantean bajo distintas perspectivas doctrinales y con distinto grado de intensidad en sus análisis


Artículo completo: GLESIA, SOCIEDAD Y POLÍTICA